BUÑUELOS SOPLADOS

Este es el recurso ideal para cuando llega la hora del mate, queremos agasajar a los nuestros con buñuelos y no tenemos ninguna fruta, pasas de uva, nueces, nada de nada para agregar. Es una masa tipo bomba, que se cocina de antemano, y que queda superdeliciosa. Vamos que les cuento como se preparan:

Ponemos a hervir en una cacerola 1 taza de agua con una cucharada de manteca y dos de azucar blanca molida (azucar comun)

En el momento que rompe el hervor le echamos de golpe una taza de harina comùn y empezamos a revolver furiosamente sin parar (con fuerza! pensando en nuestra cuñada ...) hasta que la masa se desprenda de los bordes de la cacerola.

Ahi retiramos del fuego y le agregamos de a uno por vez, 3 huevos, revolviendo despues de cada adicion. Perfumamos la masa con lo que tengamos a mano (ralladuras, escencia de vainilla o hasta granitos de anis, algunas semillas de amapola, etc)

Ponemos a calentar aceite, vamos tomando la pasta por cucharaditas y las cocinamos en fritura profunda . Cuando estan doraditos, retiran y les dan un buen revolcón en azucar molida o espolvorean con azúcar impalpable o, si tienen y se les da la gana, rocían con unos hilos de miel líquida que en contacto con el calor va a embeber los buñuelos. Para chuparse los dedos !

Notita: no pongan mucha pasta en cada adiciòn, porque estos buñuelos , mas que muchos otros, se inflan. No vaya a ser que terminemos sirviendo buñuelos tamaño berlinesas (bah! bolas de fraile jaja).

Que los disfruten!

Mabel